Hola de nuevo, esta vez escribimos desde Valencia, tras nuestra pequeña travesía de pruebas a Vinarós y Sant Carles.
Por la mañana, cuando salíamos del puerto de Vinarós, nos cruzamos con esta pesquera y su corte de admiradoras. Nos pareció una bonita imagen para compartir.
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Al fondo, en la punta del espigón, nuestro amigo Pepe agita el brazo para despedirnos. |
Pepe, que se pegó el madrugón, nos espera en el dique. |
Estos días en Vinarós, con la sensación de que nos estábamos despidiendo para mucho tiempo, hemos compartido largos ratos de música en el Piano- Bar de nuestros amigos. Tuvimos la suerte de escuchar a buenos cantantes, algunos profesionales y otros amateurs de primera línea. Ana y Toni, dos amigos con los que habíamos compartido el atraque en el mismo pantalán y ahora estupendos momentos en Valencia, quedaron fascinados la noche que les descubrimos el lugar. |
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Es un local con magia, sabor, encanto, de los que a lo largo de la geografía española solo hay un puñado, donde los insersenses (peoples del inserso) rejuvenecemos recordando viejas melodías de los años 60 y 70 y algunas más actuales de las que a todos nos gusta cantar.
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Otro sitio, donde siempre somos bien acogidos, es el Nou Bar, allí Vicente nos ha brindado su amistad y nos ha permitido catar buenos caldos, algunos nuevos para nosotros, que él selecciona y ofrece a sus clientes aficionados a los vinos. Su hermano, estupendo en la cocina y el resto del personal, han hecho de su bar nuestro sitio favorito para el tapeo en Vinarós. Ayer bebimos un rico Bierzo “Hombros” que nos regaló el último día. ¡¡ A tu salud !! Como veis la maquetación aún es una asignatura pendiente. Lo iremos mejorando. |
El madrugon no fue tal porque no hubo acostada
y como dice la tradicion , barco que no es despedido con cariño, pocas veces vuelve y en este caso quiero que volvais ,para tomar unas copas,cantar y al tiempo contar tambien las aventuras.Un abrazo